Artículo publicado originalmente en El Universal.
Baja California Sur y Aguascalientes fueron los estados que más crecieron en el último trimestre de 2018 en términos anuales, con un crecimiento de 8.8% y 8.6%, respectivamente. En contraste, 10 estados cerraron el año con tasas de crecimiento negativas, teniendo Tabasco, Tlaxcala y Morelos el peor desempeño en ese periodo, con retrocesos de 10.4%, 4.2% y 4%, respectivamente.
Durante el sexenio anterior, el crecimiento promedio de tan solo cinco estados fue superior a 4% (Aguascalientes, Guanajuato, Querétaro, Quintana Roo), y nada más Baja California Sur creció por arriba de 6%. En contraste, los estados del sur, Chiapas, Tabasco y Campeche, disminuyeron durante ese periodo, dado que los dos últimos son altamente dependientes del petróleo.
Los indicadores más recientes de crecimiento del Inegi sugieren que la desaceleración económica ya ha comenzado, y la baja en los pronósticos de crecimiento de múltiples instituciones para este año y 2020 anticipan tiempos complicados. Ante este escenario, vale la pena reflexionar sobre cuáles han sido las palancas de desarrollo para los estados que están creciendo a velocidades asiáticas, para poder reproducir esas variables en el sur de México.
En primer lugar, no es casualidad que los estados con mayor vinculación al mercado global son los que han registrado mayores tasas de crecimiento. El círculo virtuoso que genera el comercio exterior para detonar el desarrollo de los estados es muy claro, pues contribuye a generar fuentes de empleo estables, de calidad y con salarios competitivos, lo que a su vez se traduce en mayores ingresos fiscales para el gobierno y capacidad de atracción de talento de excelencia. Basta mirar las cifras del crecimiento de empleo en los estados durante la administración anterior para constatarlo: Quintana Roo, Baja California Sur y Querétaro lideran el ranking de creación de empleos por población económicamente activa.
Los estados del sur deben redescubrir su vocación productiva para incentivar la creación de empleo e inversión privada y dejar de creer que su desarrollo va a venir del petróleo. Algunos consideran que esta vocación podría estar en el turismo y en los servicios médicos de excelencia. Ello implica apostar por la educación bilingüe y el desarrollo decidido de capacidades digitales. Un esfuerzo así requiere una visión de largo plazo y un enfoque de triple hélice, en donde gobierno, instituciones educativas y sector privado se alinean para actuar de manera coordinada hacia un mismo objetivo. Ninguna herramienta es más poderosa para mejorar la condición de vida de las personas y sus familias que el acceso a un empleo bien remunerado.
Por otra parte, ante un escenario de crecimiento moderado y austeridad, los gobiernos estatales deben implementar medidas que no requieran cuantiosos presupuestos pero que puedan tener un claro impacto en impulsar la inversión productiva del sector privado, la generación de empleos y la atracción de talento. La simplificación regulatoria y fiscal, la homologación de trámites entre los distintos niveles de gobierno serían un atractivo aliciente en ese sentido. La aprobación de la Ley de Mejora Regulatoria el año pasado es un avance significativo. Su adecuada implementación y homologación a nivel estatal y local serán fundamentales para potenciar los beneficios esperados. Es una buena señal también que el gobierno esté llevando a cabo un programa de capacitación regulatoria con estados y municipios, orientado a la simplificación y al fortalecimiento de capacidades técnicas. Sería deseable combinarla con una estrategia de digitalización de trámites que contribuya a hacerlos más eficientes y transparentarlos.
Para que todos los estados puedan aspirar a crecer de forma decidida y con ello lograr la meta de crecimiento nacional de 4%, se deben apuntalar las ventajas competitivas actuales o potenciales de cada región, y con ello crear las condiciones necesarias para una mayor inversión privada y vigorosa actividad empresarial.
Luis Durán es presidente y CEO de Laureate México y UVM. También preside la Comisión Nacional de Educación de Coparmex.
Síguelo en Twitter como @LuisEDuran2.