La dislexia es una dificultad específica del aprendizaje de origen neurobiológico. Se caracteriza por problemas con el reconocimiento de palabras en forma precisa o fluida, invertir el orden de las letras dentro de las palabras y mala ortografía, principalmente.
Este padecimiento puede provocar problemas de compresión, memoria a corto plazo, léxico, lateralidad y nociones espacio-temporales, entre otras. Es importante tener en cuenta que cada caso es único, por lo tanto, la sintomatología que presente cada persona lo será también.
La dislexia no afecta la inteligencia ni las habilidades cognitivas de las personas que la presentan, incluso pueden llegar a tener una inteligencia superior. Son personas muy creativas, con mucha imaginación, intuitivas, visuales y con gran capacidad de solución de problemas. Estas cualidades los pueden hacer personas atractivas e interesantes.
El 40% del abandono escolar está relacionado con esta condición (debido a la dificultad de la escritura y la lectura).
Tipos de dislexia:
- Dislexia Superficial: Involucra a las habilidades motrices, saber cómo dibujar las letras a la hora de escribir. La gente con este tipo de dislexia usualmente escribe las letras al revés.
- Dislexia Fonológica: Involucra las habilidad auditivas. También causa dificultad al pronunciar las palabras o comprender sonidos poco familiares.
- Dislexia Profunda o Mixta: Involucra las habilidades visuales. Dificulta la comprensión del lenguaje escrito y las palabras por sus sonidos.
Lamentablemente, algunos adultos nunca fueron diagnosticados con dislexia y vivieron un infierno en las aulas de clases. Incluso podrían seguir viviéndolo en su etapa profesional. Y hay otros como Steven Spielberg, Albert Einstein, Walt Disney y Steve Jobs que han transformado el mundo por su visión y genialidad.
Señales de dislexia en adultos:
- Recuerdan mejor las caras que de los nombres.
- Confunden izquierda y derecha.
- Malas nociones espaciales.
- Dificultad para expresarse (no encuentran las palabras adecuadas).
- Son despistados y desordenados.
- Pierden la concentración fácilmente.
- Confunden palabras con pronunciación similar.
- Dificultad para seguir instrucciones y aprender rutinas.
- Problemas con el equilibrio y de coordinación.
- Saben las respuestas en matemáticas, pero se les complica plasmar el procedimiento.
- Evitan reuniones de trabajo que tengan que ver con la planeación.
- Sus síntomas aumentan al estar bajo presión, estrés o enfermos (llegan a tartamudear).
33% de los niños disléxicos presentan también TDAH (Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad)
Si bien, la dislexia es una condición de por vida, hay estrategias que ayudan a tratarla.La tecnología juega un papel muy importante en el manejo de ésta. A continuación te compartimos algunos tips que podrían ayudarte si sufres de ésta:
- Grabar juntas o conversaciones importantes para escucharlas después para no perder información importante.
- Usar apps y software de corrección de escritura y autocompletado.
- Organizarte a través de apps (recordatorios, listas, etc).
- Bajar apps especializadas para el tratamiento de dislexia (Kraneando, Dyslexia Reading Assistant, NaturalReader Text to Speech, Dyslexia Test & Tips, Voice Dream Reader, y Dislexia Ejercicios prácticos).
Es importante detectar la dislexia desde edades tempranas para encaminar a quienes la padecen a actividades en las que son buenos para que en el futuro puedan elegir una carrera adecuada. Y evitar, de esta manera, sentimientos de inseguridad y angustia a través de tratamientos, establecidos por un educador psicopedagógico o terapeuta del lenguaje, que refuercen la lectura, la escritura, la comprensión y la autoestima.
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