¿Qué viene a tu mente cuando escuchas la palabra cirujano dentista? Lo más seguro es que sea el sonido agudo del pulsador, el ritmo continuo del aspirador que succiona la saliva o el uso del espejito que ayuda a localizar caries en tu boca. Pero lo cierto es que las habilidades y los conocimientos de un cirujano dentista van mucho más allá.
Los cirujanos dentistas u odontólogos -como también se les conoce- se encargan de mucho más que la mera salud bucal centrada en los dientes. También diagnostican, tratan y previenen enfermedades bucodentales que involucran los diversos órganos que componen la cavidad oral.
Por ello, sus campos de especialización también son vastos. Entre ellos, la:
- Ortodoncia: que corrige los defectos y las irregularidades de la posición de los dientes.
- Endodoncia: que estudia las enfermedades de la pulpa de los dientes y sus técnicas de curación.
- Prostodoncia: que trata problemas de anatomía, fonación y estética alteradas como consecuencia de la perdida de una o más piezas dentales .
- Odontología pediátrica: que atiende dentaduras infantiles para que se desarrollen fuertes y sanas.
- Cirugía maxilofacial o reconstructiva: que reconstruye deformidades craneofaciales ocasionadas por fracturas o de nacimiento, como el labio y el paladar hendido, entre otras.
Estos campos de acción extienden y profundizan la acción benefactora del cirujano dentista, convirtiéndolo desde el estudio mismo de la licenciatura en un protagonista indispensable en el cuidado de la salud pública.
Sólida combinación de teoría y práctica: la mejor forma de aprender
En más de una carrera, la combinación de teoría y práctica es fundamental. La de Cirujano Dentista es uno de los mejores ejemplos.
Para el aspirante a cirujano dentista, la profundización de sus conocimientos y habilidades, y el cultivo de una relación con el paciente dependen de su acercamiento a la práctica. En la Licenciatura en Cirujano Dentista en la UVM ese acercamiento se da, primero, a través del aprendizaje con simuladores que permiten al estudiante realizar diversos procedimientos clínicos, garantizando una mejor calidad y acercamiento al paciente de carne y hueso.
Pero qué es exactamente un simulador en odontología: se trata de un molde anatómico con cara humana, cuya dentadura -elaborada con melanina y acrílico- es igual de fuerte y resistente que una dentadura real. Además, cada simulador también puede succionar, abrir y cerrar la boca, ya que cuenta con articulaciones similares a las de cualquier paciente real, permitiéndote vivir una experiencia auténtica de aprendizaje.
Como insustituible herramienta pedagógica para aplicar la teoría en la práctica, los simuladores permiten realizar procedimientos clínicos. Por eso mismo, constituyen el medio idóneo para dominar aspectos técnicos y procesos de odontología restauradora, permitiendo que el alumno desarrolle con mayor seguridad habilidades que facilitarán su trabajo.
Clínicas Universitarias para iniciar tu acercamiento al paciente real.
A lo largo de tus estudios en UVM, la práctica -con simuladores y en la clínica universitaria- resulta clave para complementar el aprendizaje efectivo en materias como operatoria dental, pediatría, prótesis fina y endodoncia, entre otras.
La inversión en esta tecnología y en el equipo necesario para atender al paciente real genera gran valor para tu formación y, al final, también beneficiará a cada paciente que atiendas en el futuro.
Así, a lo largo de tus estudios en la Escuela de Ciencias de la Salud UVM, vas afianzando tu confianza en la práctica con tecnología de vanguardia, pero también con tu desempeño en escenarios reales con pacientes de carne y hueso. Y es que las Clínicas Universitarias UVM atienden diariamente a docenas de pacientes, con quienes aprendes a relacionarte y a emitir diagnósticos, afinas tus destrezas y conocimientos, siempre bajo la supervisión de maestros expertos.
Estudia una Licenciatura en Cirujano Dentista UVM, ¡y ten la certeza de lograr el futuro que quieres!