Los avances tecnológicos pueden resultar un arma de doble filo. Si bien algunos facilitan el desarrollo de la sociedad, otros pueden representar una amenaza para ciertos sectores. Desgraciadamente, eso ocurre con la inteligencia artificial (IA), pues su rápido avance y diversificación ha puesto en riesgo a profesiones que podrían verse desplazadas.
De acuerdo con datos de El Economista, hasta 2020 había disponibles 7 mil soluciones digitales para las empresas. Para 2030 se proyecta que haya más de un millón de alternativas que permitan reemplazar las labores humanas con IA.
Como ésta se nutre de algoritmos y replica distintas labores para las que antes era necesaria la intervención humana, ahora las empresas consideran que pueden reemplazarse por la inteligencia artificial. De acuerdo con su percepción, esta ofrece mejores resultados.
Hace unos meses, el estudio Global AI Adoption Index 2022, realizado por petición de IBM, reportó que el 31% de las empresas en México ya contaban con IA para agilizar procesos, experimentar en otras categorías o mejorar en las que ya dominaban.
El mayor uso que le daban recaía en la gestión de datos para una toma de decisiones exitosa. Sin embargo, también la aplicaban para generar imágenes, campañas u otros recursos visuales.
Con el avanzado crecimiento de la inteligencia artificial en el último año, más y más organizaciones han accedido a ella para descubrir su potencial. Aunque los resultados son positivos para los empresarios, algunos profesionistas se encuentran aterrados por el avance de la herramienta. Consideran que pueden verse afectados en gran medida.
¿Cómo la inteligencia artificial ha puesto en riesgo distintas profesiones?
Si creías que las máquinas no podían tomar el lugar de los humanos, estás equivocado. Ya que la inteligencia artificial es capaz de hacer prácticamente cualquier cosa, se espera que en los próximos años diversos empleos sufran alteraciones. Entre ellos se encuentran los relacionados con números, lo que afectará directamente a profesionales como matemáticos, contadores y analistas financieros.
Diversas inteligencias artificiales ya interpretan números, cálculos, lógicas y formulas, tal y como lo hacen los humanos. Incluso algunos analistas estiman que se pueden desarrollar lenguajes de computación que capturen la totalidad de las fórmulas, teoremas y aplicaciones de las matemáticas actuales.
Otras profesiones como el periodismo y el diseño también están en riesgo debido al boom de la inteligencia artificial. Hoy, a través de ella ya son posibles la transcripción, investigación de contenidos, el análisis de datos y el monitoreo de medios. Incluso, sistemas como ChatGPT permiten la generación de textos que, de hecho, ya utilizan algunos medios.
La IA también pone en peligro la labor de escritores y autores, especialmente quienes colaboran para estudios cinematográficos o televisivos. Los redactores de copys publicitarios se suman a la lista, pues la inteligencia artificial puede ofrecer decenas de ideas en pocos y sencillos pasos.
En lo que se refiere al diseño, cada vez son más las opciones para generar imágenes o contenidos visuales que pueden engañar a muchas personas. En realidad, sólo se necesitan descripciones específicas o plantillas previas para generar contenidos personalizados y campañas para ser utilizadas en las pequeñas, medianas y grandes empresas. No se requiere ser experto en diseño para obtener una imagen gracias a la inteligencia artificial.
¿La inteligencia artificial sustituirá a los profesores?
Aunque parezca increíble, la docencia también corre peligro. Evidentemente, nunca podrá sustituir la confianza, calidez o empatía que podamos sentir por un profesor, pero la inteligencia artificial puede representar un antes y un después para dicha labor. El mismísimo Bill Gates, cofundador de Microsoft, estima que en dos años podría haber clases asistidas por inteligencias artificiales.
Según sus declaraciones, la inteligencia artificial podría comenzar como una ayuda leve para las investigaciones de los estudiantes. Luego existiría una mejora en los chatbots actuales, y gracias a la retroalimentación podrían ser quienes dicten clases de escritura o lectura, por ejemplo.
Como la inteligencia artificial se nutre de datos ya existentes, los profesores de lenguas, literatura, historia o sociología podrían tener los meses contados.
¿Qué profesiones no podrá reemplazar la inteligencia artificial?
Aunque su avance significa un riesgo para una gran cantidad de profesionistas, lo cierto es que no todas las labores se pueden sustituir por inteligencia artificial. Hay muchas que continuarán con la labor humana como su principal motor.
A su vez, habrá otras donde se tenga que lograr un balance. La mezcla entre la creatividad humana y una buena aplicación de la inteligencia artificial puede brindar resultados fascinantes.
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Competidores deportivos, trabajadores de la industria petrolera, cocineros, mecánicos, operadores de maquinaria, de electricidad, comunicaciones, reparadores, jueces y médicos son sólo algunos de los profesionales que no se encuentran en peligro por el avance de la inteligencia artificial. Claro, no se descarta que la lleguen a utilizar, pero se busca que sea un complemento productivo para sus funciones.
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