Estás en una etapa importante de tu vida y, sin embargo, también una en la que te asaltan las dudas y constantemente te preguntas si tus decisiones son las mejores. Debemos decirte que esto que experimentas es completamente normal y no eres el único a quien le pasa.
Con frecuencia te encontrarás meditando, ¿es esto a lo que quiero dedicar toda mi vida?, ¿estoy haciendo algo que realmente me apasiona?, ¿estaré tomando la mejor decisión?, ¿y si me equivoco?
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Tener metas, trabajar por ellas y perseguir tus objetivos, es una buena forma de vivir. Sin embargo, también es necesario que te plantees horizontes que no tengan que ver con tu vida profesional, sino con tu crecimiento personal. Para descubrir qué es aquello por lo que valdrá la pena que te despiertes cada mañana, debes hacer una introspección que te revele tu verdadera pasión.
Aunque hay muchos significados, dependiendo el contexto en el que lo busques, la pasión en tu vida podrás definirla como aquello que te permitirá trabajar sin sentir cansancio y disfrutar mientras lo haces.
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No hay nada más equivocado. Todos tenemos algo que nos despierta una gran ilusión y, a veces, es justo lo que nos falta para sentirnos totalmente realizados. Descubrirlo e integrarlo a tu estilo de vida, es tu verdadero reto.
Ahora, encontrar ese algo que sea solo tuyo es más sencillo de lo que crees, ¿cómo hacerlo?, pues debe cumplir con ciertos parámetros:
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1. Te hace sentir feliz. Una de las características principales cuando se practica una pasión es el estado de ánimo reflejado en una gran sonrisa en el rostro. Una sonrisa ligera y hasta contagiosa, que le indicará a los demás tu buena disposición. A veces, podemos sentir que corremos sin parar, sin llegar a ningún lado; o vemos pasar los días sin que se sientan verdaderamente diferentes uno del otro. Pues hacer algo que nos apasione evitará que eso suceda y hará que cada día valga la pena.
2. Te relaja o te da tranquilidad. La pasión es uno de los ingredientes principales para desestresarse. Cuando haces algo que te da felicidad, tu cuerpo se llena de neurotransmisores que sirven para relajar los músculos y equilibrar la actividad cerebral. Así que, un indicativo indiscutible de que se trata de algo que te apasiona es, que al hacerlo, te sientes en paz.
3. Lo realizas con facilidad. Algo que te apasiona será particularmente fácil de hacer, y de comenzar a hacer, sobre todo. Será algo característico de tu persona. Piensa en un rompecabezas, no a todos les gusta armarlos, así que a muchos les causa pereza; pero, para alguien a quien le apasiona, le parecerá poco el tiempo que pasa descifrando cada figura.
4. Despierta tu creatividad. Una consecuencia de estar relajado, tranquilo, feliz y en paz es que explota tu impulso creativo. Así es, aunque no lo creas, el dedicarte un par de horas a lo que te apasiona despejará tu mente de tal forma, que tendrás inmediatamente nuevas ideas y soluciones que tal vez, habías pasado días tratando de encontrar.
5. Puedes conocer y hablar de ello sin parar. Así es, una verdadera pasión es algo que te encanta compartir hasta con los árboles, platicas de ello a la menor provocación y cuando lo haces, tu rostro se ilumina con una gran sonrisa. Además, estás al pendiente de toda la información reciente sobre el tema, de las novedades, de los productos que salen a la venta y en más de una ocasión te habrás visto ahorrando para conseguir algo relacionado. Bueno, pues eso se llama pasión.
Es importante que identifiques las pasiones de tu vida y las cultives a lo largo del tiempo, de esta forma te mantendrás siempre en equilibrio y con un buen ánimo para enfrentar los retos que sean.
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